Tragedia y Farsa

En El 18 Brumario de Luis Bonaparte, Carlos Marx escribió que la historia suele repetirse dos veces: la primera como tragedia y la segunda como farsa. Se refería, desde luego, a la comparación entre Napoleón y su sobrino Napoleón III, ese que nos mandó a Maximiliano de Habsburgo.

Al parecer, su predicción se cumple también en México, como nos lo hicieron notar algunos ciudadanos que andaban festejando en el Zócalo la decisión de defender a toda costa la valía de su voto y que nos entregaron este volante.

No les falta razón a tan perspicaces observadores. En 1913, Victoriano Huerta traicionó a Madero, con la ayuda del nefasto embajador yanqui Henry Lane Wilson. Sólo dos países reconocieron su gobierno espurio: Estados Unidos y España... ¿Les suena conocido?

Uno fue el gran tirano, la negra imágen de la traición y el asesinato.
El otro es apenas un pelele, traidorzuelo de poca monta que no llegará lejos.